sábado, 4 de febrero de 2012

Lógica individualista

Como dije en facebook, últimamente estoy pensando/escribiendo bastante. Creo que llegó la hora de plasmar un poco todo lo que pienso y desarrollarlo, ya que si queda en mi cabeza nunca logro dar un paso adelante e ir más allá en el razonamiento. Soy una persona a la que le gusta tener relaciones sanas. Y por ese lado va el texto de hoy.

¿A qué me refiero con relación sana? Me refiero a una relación en la cual las dos personas son conscientes de su conexión y actúan en consecuencia para que esta conexión sea beneficiosa para ambas. Parece sencillo decirlo de esta manera porque uno supone: “si te relacionás con alguien es porque te interesa o importa, o porque te hace bien”. Lamento informar que en la actualidad esto no se da muy a menudo. La mayoría de las personas tiende a establecer relaciones basadas en necesidades puramente propias sin tener en cuenta el ente llamado “relación”. Esto lo podríamos vincular tranquilamente con el nivel de individualismo presente en la sociedad actual, en la cual importa más uno mismo -y sus necesidades- que los demás.

Ergo, la formación de relaciones se da por meros intereses individuales. Esta frase está cargadísima de un valor que es importante desarrollar porque a la vista del grueso de la gente no es algo que genere un replanteo profundo. Las relaciones cuyas causas son pura y exclusivamente la satisfacción de necesidades propias son uno de los tantos tumores malignos de la sociedad. Es inconcebible que una sociedad en su conjunto funcione de una forma beneficiosa para ella misma si se parte de una base en la cual la mayoría de las relaciones  tienen origen en el individualismo.

Si se parte de la premisa de que “el ser humano es un ser sociable”, claramente habría que poner como prioridad la forma en la que las personas se relacionan. Si el motor de estas relaciones es una causa ajena a lo que implica la conexión de las personas, se pierde o se desvía la esencia de una de las características principales de estas mismas, la sociabilidad, arrojando como resultado un ser racional –teniendo en cuenta los sesgos– cuyo grupo de pertenencia no está dentro de sus prioridades.

Dicho de otra forma, las personas en la actualidad son sociables por el hecho de comunicarse entre ellas. Pero por otro lado no buscan construir relaciones sanas las cuales conlleven a que el grupo completo (la sociedad) funcione en beneficio de sí mismo y por lo tanto de todos. Por el contrario, establecen relaciones cuyo origen es una necesidad propia y la satisfacción de esta misma, provocando así que la relación pase a segundo plano.

Entonces, ¿cómo pretende el conjunto de personas que su modelo de sociedad actual –sea cual sea– funcione en beneficio de todos si la lógica es las relaciones más básicas es completamente individualista? Hay que romper con esta lógica para poder establecer un modelo funcional y beneficioso para la sociedad.

Espero críticas.

1 comentario:

  1. Yo veo el problema en la visión trastocada del amor (en todas sus formas). Es un amor doloroso, desde los más mínimos celos hasta la persona que te asesina por ellos. Un idea de amor martirizado donde uno se completa con el otro, busca su "media naranja".

    Eso me parece, utilizando el término técnico, una reverenda pelotudez.

    Mi pensamiento es: yo tengo dos lados, no me falta ninguna mitad. Si quiero amar a alguien (sea como familia, amigo, pareja) primero tengo que amarme a mí porque no puedo dar lo que no tengo.

    So: hoy en día la gente no se ama porque cree que puede complementarse con el otro. Ignorar lo que no le gusta de uno porque lo tiene el otro. Y por eso creo que la sociedad hoy en día se basa en relaciones enfermizas/por interés.

    (Soy Moony L.)

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